Ya han terminado las Navidades. Las cogemos con ganas, hacemos dulces, decoramos la casa, las primeras compras navideñas, quedamos con amigos a comer, organizamos comidas en casa, las niñas cogen las vacaciones. Conforme avanzamos, nos vamos cansando de la cocina, la música de los centros comerciales se hace infernal y sobra gente por todas partes, no recuerdas cual fue el último día que comiste en casa y sólo te apetece un caldito calentito, estás hasta las narices de tener que apartar el enorme árbol cada vez que quieres abrir la puerta del mueble del salón, las niñas siguen de vacaciones y ya no saben en qué entretenerse, ni tú en qué entretenerlas. Y cuando llega el día de Reyes y por la tarde recoges la casa y quitas todos los adornos navideños, respiras profundamente... y te entra una paz de espíritu... hasta el año que viene.
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| ¿Entendéis a que me refiero cuando digo que termino hartita del arbolito? |
De estas Navidades guardo tres experiencias muy bonitas. Por un lado, he visitado a una antigua amiga del Instituto, María José, a la que, por mucho tiempo que pase sin vernos e incluso sin hablar por teléfono, a los cinco minutos del reencuentro parece que no nos hubiésemos separado desde los catorce años, cuando nos conocimos. En estas fechas, también he podido ver a mi amigo Matías (¡madre mía, amigo desde el colegio!) y a su maravillosa familia y pasé un día fabuloso, hablando sin parar de nuestras cosas (con lo que a mi me gusta darle al palique) y viendo disfrutar a nuestros hijos, que ya se van acercando a la edad en la que su padre y yo nos conocimos.
Y en estas Navidades, mi hija Candela, con nueve años, ha resuelto el Misterio de los Reyes Magos. Ella no olvidará este momento. Yo tampoco. Ella se siente más mayor (y no quiere). Yo la siento más mayor (y tampoco quiero). Y no puedo evitar que se me escape una lagrimilla. Ella tampoco.
Y diréis ¿qué tiene esto que ver con el bacalao con pasas y piñones? Pues nada, la verdad. Pero me apetecía un montón contarlo. Son las cosas que hacen que cada momento de tu vida sea irrepetible y como siga poniéndome así de cursi y sentimental, en lugar de poner una receta voy a tener que sacar la caja de kleenex y repartir pañuelitos a diestro y siniestro a todo el que haya tenido el detalle de venir a verme, todo inocente, a ver como se prepara el bacalao con pasas y piñones.
Así que allá vamos, nos limpiamos los moquetes y listos para esa receta.
INGREDIENTES:
- 4 lomos de bacalao
- 1 cebolla grandecita
- 2 dientes de ajo
- 2 tomates maduros
- Pasas y piñones al gusto
- 1/2 vaso de vino dulce (Málaga Virgen, Jerez, Oporto..., cualquiera es bueno)
- (Otro medio vasito para ir tomándolo mientras cocinas, sienta muy bien)
- 1/2 vaso de agua
- Aceite de oliva, sal y pimienta
PREPARACIÓN
Yo suelo utilizar bacalao fresco y para esta receta es lo que hice. Si vas a utilizar bacalao salado, debes tener la precaución de desalarlo.
Os paso este enlace en el que viene muy bien explicado el proceso para desalar bacalao, yo no podría explicarlo mejor:
http://www.consumer.es/web/es/alimentacion/en_la_cocina/trucos_y_secretos/2008/01/10/173687.php
(Por eso utilizo el bacalao fresco, jajaja)
Enharinamos el bacalao y lo freímos en una sartén. No mucho, lo suficiente para que se dore un poquito.
Cortamos la cebolla y fileteamos el ajo. Pelamos el tomate, le quitamos el agua que tiene y troceamos en pequeños cuadraditos. En una cacerola más bien ancha, vertemos el aceite de oliva, y cuando esté caliente sofreímos la cebolla y el ajo. Cuando esté bien pochadita, añadimos el tomate y rehogamos, hasta que esté bien hechito. Vertemos el vino y el agua y dejamos cocer unos diez minutos. Añadimos el bacalao frito, las pasas y los piñones. Movemos la olla para que se ligue bien la salsa y dejamos cocer otros diez minutos para que se integre la salsa y el bacalao coja sabor.
Montamos el plato poniendo un trozo de bacalao, cubrimos de salsa y acompañamos de arroz de grano largo, como, por ejemplo, el basmati.
Os vais a llevar una grata sorpresa. Tiene un sabor delicioso, resultando un contraste muy agradable. Espero que os guste.
Buen provecho!!!
Me gustó mucho, mucho lo que cuentas antes de dar la receta. Gracias por compartir esos momentos con tus lectores.
ResponderEliminarYo todavía tengo contacto con mis queridos amigos de colegio, nos vemos, nos escribimos, nos llamamos. Cómo será el grupo que hasta hemos "adoptado" a esposos y parejas como nuestros.
Espero que la resolución del misterio por parte de tu hija no haya sido muy traumática.
Me ha encantado la introducción que aunque no tiene que ver con la receta, nos encanta, ya nos estás acostumbrando a la historia antes de la receta. El bacalao tiene una pinta estupenda, a mí me encanta esa combinación dulce y salado. Besos
ResponderEliminarLa receta me ha encantado, pero tus palabras me han llenado... Mi niña es solo un bebe, pero los años pasan y solo pensar cuando se hacen grandes y te vas dando cuenta que ya no es tan bebe... ayyy dame un pañuelo a mi, por favor! jeje, lo que si es seguro que siempre, siempre serán nuestras pequeñas.
ResponderEliminarBesos guapa
laly, qué buena receta! yo hice una muy, muy parecida no hace mucho, y es verdad que está riquísima
ResponderEliminarLa receta genial. ¡Qué pena que estoy con la dieta post-Navidades y tendré que esperar un poco para hacerla!
ResponderEliminarCon respecto a la "antesala de la receta" te diré que yo me he quedado con ganas de más, que lo he pasado genial y, sobre todo, que he disfrutado muuuuuuucho con mis dos pitufas los días que hemos coincidido.
Así es que ya estoy contando los días que faltan para la Semana Blanca. Es que , no lo puedo remediar, ¡cómo me gustan las vacaciones!
Me encantan tus entradas,¿ nosé si más que tus recetas...? Que bien espresas todo , con que facilidad, y con que chispa! Es una pena , que los hijos crezcan..., pero cada edad tiene su encanto, ya lo comprobarás! Que niñas más guapas tienes, el árbol es precioso , a mí me gustan grandes, si estorba , se aguanta , total son pocos dias. Yo, ayer guardé los adornos navideños, hasta diciembre , si Dios quiere!
ResponderEliminarEl bacalao , se ve exquisito!
Gracias por tus visitas.
Besitosss.
Ah! , muy bonita ésta plantilla tambien!
ResponderEliminarTendré que probarlo, se ve tan rico.
ResponderEliminary no te preocupes por enredarte antes de la receta,estas cosas son nuestro pan de cada día y viene bien contarlas. Que niñas mas guapas tienes. Besines para todos.
Hola a todas. Muchísimas gracias por pasar por aquí, me encanta saber de vosotras.
ResponderEliminarGabriela, la verdad es que son amistades irrepetibles. Y no digo que no puedas hacer buenísimas amistades de adulto. Pero estas amistades de la infancia despiertan unos sentimientos únicos pues te llevan de nuevo a vivencias que nunca más vas a repetir. Me alegro un montó de que conserves tus amistades del colegio, resulta muy gratificantes.
Afortunadamente, Candela sigue tan feliz como siempre. La mamá de Candela lo lleva peor, jajaja.
Un beso guapa.
Ay Raquelilla, y yo que siempre pienso que me enrollo como una persiana. Y es que me encanta hablar y contar cosas y he encontrado un sitio perfecto. Y como, aunque no os conozca personalmente, ya sois parte de mi día a día, pues ¿a quién mejor que contarle esto que a vosotros? Un besito muy fuerte.
Hola Cuinera, ¿a que da una pena tremenda que se hagan grandes? Aunque te tengo que decir que hablando el jueves con una amiga que tiene a sus niñas más mayorcitas, me dijo que en cada edad se disfruta de algo diferente y también muy gratificante. Así que, hala, a cerrar etapas y comenzar nuevas con la misma ilusión. Besitos guapa.
Hola Charo guapa, es una receta que nunca falla ¿verdad? La verdad es que el bacalao está bueno de cualquier forma, pero así le da un toque muy especial. Gracias por venir a verme.
Tita, no estés triste por la dieta, ya le estás viendo buenos resultados y estás divininísima, como siempre. Yo me he quedado con ganas de más vacaciones (como siempre), pero de Navidades ando bien servida, jajaja. Un achuchón muuuuu fuerteeeeee.
Golonsegus, no sabes como me gusta que me digas esas cosas, es muy halagador, muchísimas gracias. La historia del árbol tiene su miga. Cuando lo vimos en el centro comercial, no nos pareció tan grande y lo compramos pensando en un rinconcito de la casa !!!!! Imagínate que le hemos tenido que quitar dos ruedas de ramas de la parte de abajo porque si no, nos echa de la casa, jajaja. Que Dios nos conserve el oído porque la vista y la perspectiva, mi marido y yo la tenemos un poco distorsionada.
Hola Rocío (chismes y cacharros), guapísima. Me encanta verte por aquí. Pues sí, como dices, estas cositas del día a día son las que tenemos que contar, pues son las que realmente importan, ¿verdad? Espero que te guste esta forma de preparar el bacala. Ahora mismo me voy a ver tu receta de bacalao, seguro que es el mejor del mundo, jajaja. Besitos
Lalita, qué trabajadora que ya has quitado los adornos navideños. Yo estoy esperando que lo haga él (Luc, mi medio naranjo) pues estoy en fase histérica de pre-exàmenes de la Uni (en febrero) y seguramente lo harà...
ResponderEliminarLo que nos dices de tu Candela còmo te comprendo, a mì también me pasò con los mìos que son mayores que los tuyos, pero los niños de ahora estàn màs resabidos que nosotros...yo sì que me quedé hundida cundo supe que mi "querido rey Gaspar" al que escribìa una cartita cada Navidad y que me respondìa también por carta, era mi padre...mi mundo de ensueño se esfumò...y el tiempo pasa demasiado de prisa por eso a mi edad me encanta revivir esa atmòsfera de ilusiòn que nunca màs volverà...
Laly qué rico bacalao, a mì es un pescado que me encanta y en casa también, asì que me guardo la receta que se ve estupenda con el contraste de sabores.
Un beso muy grande guapìsima
desde Venecia
Chusa
Impresionante este plato Laly, hmmm... me comería uno ya mismo, para merendar :-) Besotes.
ResponderEliminarHola Laly, que maravilla de post! me ha encantado! y el bacalao también, ehhh?
ResponderEliminarA mi después de navidades es que me entra como un ataque de minimalismo después de tanta saturación... pero lo de ver a amigos eso sí que me sigue gustando todo el año... y lo de rajar también, jajajaj!
oyeee fijate Candela que espabilada y guapa re-guapa que es... pero que penita... si es yo ver al mío, Gustavo con 2 años y me parece ya super mayor... menos bebito y yo quiero pero tampoco quiero, seguro que me entiendes ;-)
Besitos muchooooooooos!
Este año me he hecho la loca y solo puse un arbol que hice de una revista plegada, así que no he guardado nada.
ResponderEliminarDónde hay niños pequeños la Navidad es otra cosa, disfruta ahora que cuando crecen es diferente.
El bacalao me encanta con cualquier receta así que ya me anoto esta receta que estará de muerte.